jueves, 28 de abril de 2016

Una madrastra quiere ser la más bella del reino.

Una hechicera encierra a una niña en una torre

        Tras hacer un pacto encierran a Rapónchigo, una niña de doce años, en una torre.

   Hace mucho tiempo, dos padres a cambio de rapónchigos donan a su primera hija a una hechicera. A esta le llamaron Rapónchigo. A los doce años la encierran en lo alto de una torre que sólo tenía una ventana. Un día el hijo del rey la escuchó cantar y se enamoró de ella, pero cuando la hechicera se enteró le tendió una trampa al hijo del rey y se llevó a Rapónchigo a un desierto. El chico se cayó de la torre y se quedó ciego. En el día de ayer, el chico llegó al desierto, allí encontró a Rapónchigo quien se puso a llorar. Sus lágrimas cayeron en los ojos del chico devolviéndole la vista.

                                       Ilustración de Rapoónchigo en la torre hecha por Katalin Szegedi.